Barro


Estoy en el baño del bar. Me meto dos dedos de la mano derecha en la garganta y con la otra me sujeto el pelo. Siento subir el vómito. Acido. Por eso no quería vomitar. Alguien golpea la puerta. Me limpio la barbilla y me peino un poco. Abro mientras intento la mejor cara de rescatada. Sé que me salió muy mal. La chica que entro atrás mío me miro con lastima. Abro la canilla. Me saco los lentes, los apoyo en el borde del lavamanos. Me enjuago la cara. Me miro en el espejo.  Estas muy ebria, muy ebria. ¿Por qué? ¿Otra vez? ¿Tanto te afecta? ¿De verdad? Es que si, todavía lo extraño. ¿Por qué todavía lo extraño? Quiero ser más fuerte. Basta. Basta. Rescátate. No está el. Son sus amigos. Tomo fuerzas. Dale. Salí. Sino en cualquier momento cae Juli que se dio cuenta que estas re en pedo. Busco a mis amigas. Están en la esquina contra la ventana. Acaban de comprar otra cerveza. ¿Quién más esta con ellas? ¿Ese es Federico? Hola, ¿Cómo estás? Me mira con esa cara. Yo río. Que no se me note que acabo de vomitar. Me agarra de la mano. Me dejo llevar. Salimos del bar. Caminamos una cuadra. Nos besamos. Sí, es lo que necesito. Que alguien me bese, que alguien me toque. El me toca. No pierde el tiempo, ya saco uno de mis pezones por fuera de la blusa. Besa muy fuerte. No puedo coordinar. Estoy muy ebria y él va muy rápido. Se desespera y me arranca los lentes. ¿Qué haces? Los tira al piso mientras sigue besándome. Tiro mis lentes al piso. Llovió. Hay barro. Tengo miedo de que los pisemos. El sigue besándome, me toca. Ya me levanto la pollera y me corrió la bombacha. Me lleva la mano para que lo toque. Esta erecto. Me agarra fuerte del pelo. Me da vuelta y me empuja la espalda para que me agache. Está queriéndome poner en cuatro. Pero llovió. Hay barro. Me voy a embarrar las manos. Me embarro. El sexo es eso, entrega. Entregate. Tenes que estar disfrutando. Me penetra. Sin forro. Otra vez sin forro. No puedo, no me sale. No sé cómo decirlo. No me sale pedirlo. Me penetra, una, dos, tres, cuatro veces. Mis manos se resbalan en el barro. Tengo miedo de caerme. No quiero embarrarme. No puedo embarrarme. Cinco, seis. ¿Qué es eso que se escucha? Viene gente. Vienen todos, cerraron el bar. Me levanto, intento acomodarme rápido pero mis movimientos son muy torpes, me resbalo. No puedo tocarme la remera con las manos, están embarradas. Él se sube los pantalones y empieza a caminar hacía su grupo de amigos. ¿A dónde vas? Esperame. ¿Y mis lentes? ¿Dónde están mis lentes? Los busco por el barro, revuelvo en el barro. No están, no los encuentro, me resbalo. Mis lentes, quiero mis lentes. No veo nada. Por favor. ¿Qué te pasa Lu? Mis lentes, no encuentro mis lentes. No llores, no llores. Ahí los buscamos. Acá están, toma. Están embarrados, no tengo nada para limpiarlos. Ayudame, acomódame la remera por favor. No llores más, tranquila. Camina. No puedo, no veo nada. No pasa nada, yo te agarro. Dale camina. ¿Me vieron? ¿Me vieron, no? No quiero que él lo sepa. No quiero que se entere. Va a pensar que soy una puta.